sábado

Calatañazor


La llegada a Calatañazor por su parte alta depara una sorprendente panorámica de la medieval ciudad que presenta por ese lado, el suroriental, el escarpe a cuyo pie discurre el río Milanos. La profundidad de la hoz torna innecesaria la utilización de murallas para la defensa de la población; su caserío se muestra por este frente formando una irregular fachada sobre cuyo perfil destaca la sólida presencia de su iglesia parroquial